Para quienes preferimos otras fuentes mediáticas para estrenar cada día, las portadas que compiten por la venta en los kioscos o conviven en los espacios y transportes públicos lanzan su primer informe en grandes titulares. Pero a veces informan más bien de la primera reacción de quienes redactaron los titulares.
Así La Vanguardia,
- el lunes 1 de agosto:
CONTRA RELOJ
- eL martes 2:
LOS MERCADOS SE HUNDEN PESE AL PACTO EN EEUU
- el miércoles 3:
ALERTA MÁXIMA
- el jueves 4:
RESIGNACIÓN
- el viernes 5:
EUROEMERGENCIA
Abrumado, el lector matutino de estos titulares tiene que buscar datos que los justifiquen leyendo este u otros diarios, o escuchando una emisora, o viendo y escuchando un canal, o sumergiéndose en un digital. Pero nuevos relatos informativos suelen derogar a los del diario impreso. El presente ya es otro.
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